
El cruce a Chile resultó el primer gran desafío para Pablo Cid de La Paz, que con su Beta, cerró su cuarta etapa sin grandes problemas. El intenso frío, el sol intenso que por momentos ciega la vista la falta de oxígeno y una geografía desafiante y cambiante, no fueron impedimentos para el platense. Pablo terminó entero aunque sus reservas físicas se van limando. El piloto local que quedó en el puesto 132º en la general afrontará hoy un doble desafío: por un lado superar lo hecho en la edición pasada (fue descalificado en el quinto segmento) y llegar de vivac a vivac con su Beta.
En el programa La Escuderia que se emite por La Redonda 100.3 de lunes a viernes a las 17hs y en dialogo con Daniel Zolezzi, Pablo dijo lo siguiente: "Ya estoy en Calama, Chile. Fue una etapa muy larga, empezamos con los quinientos kilómetros de enlace entre el Paso de Jama y Calama, sobre una altura de cuatro mil quinientos metros, y luego nos internamos en el desierto, con tormenta de arena, mucho polvo, mucha cortada, pero bueno, terminamos enteros. Finalicé en un ritmo muy bueno y la moto está entera".
Pero en esta travesía, no está sólo. Su corcel conoce muy bien a su dueño y como si entendiera lo que Pablo le pide, "tranquilito y por las piedras" lo lleva de vivac a vivac. "La Beta está muy preparada, el año pasado la agarró el mecánico del Dakar en mi agencia en La Plata durante dos meses, tiene hecho hasta el último detalle. Este es el tercer Dakar que corre, tiene hechas muchas modificaciones y por ahora no tiene problemas. Sólo van pasando cosas muy chiquitas, que las vamos corrigiendo rápidamente", dijo el platense.
La altura por encima de los cuatro mil metros, hace mucho daño, ese deterioro que no se percibe rápidamente pero que desgasta segundo a segundo. "Sufrimos mucho el frío, la verdad se hizo duro. Mucho frío, fuimos con ropa de abrigo debajo del buzo, fue largo y se hizo muy largo. En un momento me agarró mucho sueño y me caía. Por eso paré en una de las ambulancias de la organización. Y era porque me faltaba el oxígeno. Así que me tiré unos minutos, me oxigené, para poder seguir, porque en realidad la falta de aire te adormece", confesó Cid de La Paz.
"Esta vez, como se hace el cruce de un país a otro, la organización primero mandó a los pilotos y luego a los equipos de asistencia, que estarán llegando por la noche. Por eso, lo único que tengo para hacer ahora es comer, lavarme un poco y estudiar la hoja de ruta para mañana. Después no se puede hacer más nada", contó Pablo.
"Mañana (por hoy), bien temprano a las cinco estamos corriendo otra vez. Se viene una etapa de cuatrocientos cincuenta kilómetros, de los cuales, cuatrocientos se anda sobre el desierto. Dicen las malas lenguas que es la primera etapa en serio de este Dakar", concluyó.
JAJAJAJAJA OXIGENO?.QUE COMA HUEVOS ,NO SACAMOS UNO COMO LA GENTE .LA P.Q.L.P
ResponderEliminarCorrelo vos ya que tenes tantos huevos
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